Si vamos a definir el amor no podemos dejar de decir que no se concibe a un cristiano maduro sin amor. Gálatas nos dice que dentro de los elementos del fruto del Espíritu el primero que se menciona es el amor. De modo que el amor evidencia que el creyente se encuentra lleno del Espíritu de Dios. ¡Cuán bendecidos somos cuando toda nuestra iglesia disfruta del amor verdadero! Sin embargo, para poder disfrutar del amor verdadero tenemos que tener claro qué es el amor.Cuando Pablo define el amor, usa una serie de cualidades que son evidentes en los creyentes maduros. Él entiende que la gran mayoría de los problemas que tienen estos hermanos es precisamente porque no han entendido lo que es el verdadero amor y lo define de modo que ellos puedan corregir los distorsionados comportamientos que tenían. Repasemos cada uno de estos puntos de definición:
• “El amor es sufrido” pero ellos no pueden sufrir la ofensa y el agravio (6:7).
• “El amor es benigno” pero ellos se han olvidado de los pobres de la iglesia (11:22).
• “El amor no tiene envidia” pero ellos están divididos y tienen celos entre ellos mismos (3:3).
• “El amor no es jactancioso” pero ellos han dejado pasar por alto el pecado dentro de la iglesia (5:6).
• “El amor no se envanece” pero ellos se han envanecido (4:6,18,19; 5:2; 8:1).
• “No hace nada indebido” pero ellos han avergonzado a sus hermanos pobres (11:22).
• “No busca lo suyo” pero es necesario decirles que no busquen su propio bien sino el de los otros (10:24).
• “No guarda rencor” pero es necesario decirles que ahora celebramos una pascua que no lleva la marca de la levadura de malicia y de maldad sino sin levadura, tomando en cuenta que las cosas que les sucedieron a los israelitas en el desierto sucedieron para que no codiciemos lo malo y seamos niños en la malicia (5:8; 10:6; 14:20) .
• “No se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad” pero ellos hacen todo lo contrario y llevan a sus hermanos a penosos juicios públicos en jurados que no se gozan en la justicia sino en elementos puramente humanos (6:1-6,8).
• “Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta” pero ellos viven como si no fuesen necesarias estas cosas para seguir a Cristo cuando otros se entregan por amor (4:8-13).En otras palabras, Pablo les está diciendo inmaduros aún cuando ya lo ha hecho en el capítulo de la misma carta. Todo cristiano maduro se siente comprometido con vivir a la altura del amor descrito en 1 Corintios 13. Es hora de que comencemos a valorar nuestra madurez en Cristo usando el parámetro correcto: el amor.
Definir la madurez a la luz del amor verdadero cambia mucho nuestro concepto de lo que es un cristiano maduro. Tristemente he conocido gente que lleva muchos años en la iglesia pero no acaba de madurar; no porque hagan cosas tontas o sin sentido. No han madurado porque simplemente no pueden amar a la altura de lo que expresa 1Corintios 13. Entonces, no importa cuántos años lleves en la iglesia, tu madurez depende de tu capacidad de mostrar el amor de Dios a otros. Estos son tiempos duros y difíciles, y la iglesia de Jesucristo no puede darse el lujo de hacer a un lado el amor para priorizar otras cosas. Hagamos a un lado nuestro egoísmo y egocentrismo, y pensemos más con el corazón.
Como dijera aquella hermosa canción:
«Ayúdame a mirar con tus ojos,
Ayúdame a sentir con tu corazón.
No quiero vivir más siendo insensible,
A tanta necesidad, ¡oh Jesucristo!»
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